domingo, 23 de octubre de 2016

El Jiu-jitsu: Milímetro a milímetro. El football: Pulgada a pulgada.

La primera vez que tuve contacto con el Foot ball o futbol americano como le dicen en mi tierra, realmente no supe lo que vi. No podía comprender que estaba pasando en la pantalla. Dos grupos de personas se empujaban constantemente, de manera violenta, con la finalidad de quitarse un balón y llegar a la meta. ¿Por qué eso era capaz de emocionar a tantas personas? Tuvo que pasar algún tiempo para poder comprender que es lo que admiraban durante ese partido.

Este deporte se basa en la estrategia, se busca la manera de anular las acciones defensivas del oponente para poder pasar a uno de los miembros del equipo para el que jugamos. Todo se basa en encontrar ese pequeño espacio por donde se puede pasar el balón para llegar a la meta.

Cada entrenador, y por lo consiguiente cada equipo, tiene una colección de estrategias, tanto defensivas como ofensivas para poder lograr este cometido. Y lo más importante, saben cómo combinarlas para poder obtener el resultado. El touchdown. Hay un dicho: “El Foot Ball es un deporte de brutos donde los brutos jamás ganan”

Se preguntaran ustedes: ¿Y que tiene todo esto que ver con el Jiu-jitsu?
Estoy seguro de que, los que practicamos este deporte, en más de una ocasión hemos escuchado comentarios tales como: ¿Por qué se revuelcan en el piso? ¿Cómo saben quién gano? “Esto es muy violento” o ¿A poco pagas porque te peguen?

El Jiu-jitsu a nivel deportivo es un deporte en el que la estrategia es vital para poder seguir adelante. El tener una estrategia efectiva no es sinónimo de victoria en el torneo, y menos aun de permanencia en los primeros lugares con el paso del tiempo. El entrenador debe de estar reevaluando constantemente el plan de juego, así como los puntos fuertes y débiles de sus competidores para poder aplicar un plan de juego acorde al tiempo, lugar y situación que se esté presentando.

El atleta, al estar en el combate, tiene que analizar y tomar decisiones en tiempo real, ante un oponente que siempre está cambiando su estrategia, factores como peso, altura, alcance tienen que ser tomados en cuenta. Herramientas de percepción y proceso de información tales como “la ventana de Johari” tienen que ser utilizadas al mismo tiempo que tienes que evitar que tu oponente literalmente te arranque el brazo. Una tarea nada fácil.

¿Cual es el ingrediente secreto entonces para ganar y prevalecer en el mundo competitivo del Jiu-jitsu en los tiempos actuales?

La respuesta a esta pregunta no está dicha aun, sin embargo, El discurso dado por AL Pacino en la película “Any Given Sunday” Dirigida por Oliver Stone en 1999, nos puede dar una guía sobre cómo podemos llegar a la victoria.

Mirad, cuando te haces mayor en la vida, hay cosas que se van
Vamos, eso… Eso es parte de la vida.
Pero sólo aprendes eso cuando empiezas a perder esas cosas.
Descubres que la vida es cuestión de pulgadas.
Así es el fútbol, porque, en cada juego, la vida o el fútbol
El margen de error es muy pequeño
Medio segundo más lento o más rápido y no llegas a pasarla.
Medio segundo más lento o más rápido y no llegas a atraparla.
Las pulgadas que necesitamos están a nuestro alrededor.
Están en cada momento del juego, en cada minuto, en cada segundo
En este equipo luchamos por este terreno
En este equipo nos dejamos nosotros y cada uno de los demás por esa pulgada que se gana
Porque cuando sumamos una tras otra, porque sabemos que si sumamos esas pulgadas
Eso es lo que va a marcar la puta diferencia entre GANAR O PERDER, ENTRE VIVIR O MORIR

Todo mundo queremos ver ganar al atleta de manera dramática, en el último segundo del round ver una técnica que haga las veces de la “Deus ex Machina” y le de la victoria al atleta que, hasta ese momento, tenía todo en su contra. La realidad es Distinta: En la IBJJF existe un sistema de puntuación que considera posiciones, transiciones, ventajas y amonestaciones. Esto es debido a que el nivel competitivo es muy alto, y si no existieran dichos puntos, la mayoría de las peleas terminarían en empates, o si no existiera el tiempo del round, en batallas históricas, como las que tuviera el maestro Helio Gracie, o m as recientemente, Royce Gracie, con sus 90 minutos contra kazushi Sakuraba.

“Ganar por puntos es como comer a medias” Reza otro dicho, pero si vemos estadísticamente, la mayor cantidad de peleas son ganadas por puntos, ventajas o penalizaciones. Los atletas modernos del Jiu-jitsu han puesto el estándar muy alto como para poder vencer siempre de manera avasalladora. Lo que son las pulgadas para el futbol americano, para el jiu-jitsu se han vuelto milímetros.

En 14 años de practicar este deporte, he podido estar presente desde el primer torneo de Jiu-jitsu brasileño, he podido ver como 20 o 30 atletas participantes se han vuelto 900. Y como la sede de un torneo paso de ser el tatami de una academia, a deportivos con capacidad para albergar más de 2,000 espectadores. Ver el crecimiento de la industria alrededor de este arte, los medios de comunicación y las redes sociales. El Jiu-jitsu ha crecido más en los últimos 30 años que las otras artes marciales en 300. Me atrevería a decir que, si es manejado de la manera adecuada, estamos ante el nacimiento de un nuevo deporte de las masas. Una razón más para que un fan se despierte los fines de semana, y que Haga sol, llueva, truene o se caiga el cielo mismo, el se preparara para ir al estadio a ver a su equipo favorito de Jiu-jitsu dar todo en el tatami.


Es a nosotros, entrenadores y atletas de este arte marcial y deporte, que nos corresponde dar un ejemplo de ética y conducta deportiva a las nuevas generaciones, a los niños del futuro, los que algún día se pondrán la camiseta de un equipo de jiu-jitsu y dirán: “Cuando sea grande, quiero ser un campeón como ellos”




Luis Fernando Cadena Velázquez.

León Guanajuato a 23 de octubre de 2016 

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